Un corazón dividido
Este mundo está lleno de imperfecciones, cada una de las cosas que tocamos le hace falta algo. Una roca, un árbol, un animal hasta nosotros los seres humanos. Nacemos con un corazón, que no es el que mostramos en las pinturas o el que dibujamos en cartas, lienzos o retratos, sino que es la mitad de este, porque todavía no hemos podido completar la pieza que nos falta para completar la perfección de nosotros mismo. Nos pasamos la vida entera buscando completarlo muchas veces tratando de encajar con otro que creemos que es compatible, pero eso no es algo que podamos elegir, es algo nace dentro de nuestros corazones. Todo por el simple hecho de completar este crucigrama de que somos en la vida.
Según la biblia en el libro de génesis: Dios creó al hombre y a los animales en pares de 2, luego al ver que el hombre se sentía solo, le creó una mujer de una de sus costillas que retiro mientras este dormía. Así se creo la mujer. Para mí, que el corazón del hombre fue partido en dos, uno entregado a la mujer y el otro dejado en el hombre. Por eso el afán de muchos en encontrar la fracción restante de su ser.
Muchas veces escogemos ignorar esa fracción o tal vez sentimos que no sea la correcta, sin embargo, en la vida solo existe una parte y no se dividen en pequeñas porciones que buscamos hasta llenar el vacío que tenemos.
Tener los ojos muy abiertos en un mundo tan grande, significa estar ciego, porque miraras muchas personas, pero no te enfocaras en una por las distracciones, mientras que si se tiene el corazón abierto, la misma realidad se distorsiona y solo existe una en el mundo, y esa es tu otra mitad.
Escrito por: Elías Rodríguez
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